Los peligros del sobrepeso en el embarazo

Mariela Villar Heidelberger, PhD y creadora & Directora Embarazo Activo®, reflexiona: “hay que evaluar cuánto pesa una mujer cuando queda embarazada y cuánto sube de peso durante el embarazo. Son dos factores que pueden suponer un efecto negativo en la salud de la madre y del bebé”.

Mariela Villar, entrenadora y fundadora de Embarazo Activo.

Quedarse embarazada con un índice de masa corporal (IMC) normal e ir subiendo de peso durante el embarazo, dentro de unos parámetros normales, son formas efectivas de cuidar la salud de la madre y del niño/a.

Se producen numerosos peligros ocasionados por tener sobrepeso en el embarazo. Villar afirma que “tener un índice de masa corporal alto durante el embarazo aumenta el riesgo de distintas complicaciones del embarazo, entre las cuales se incluyen las siguientes:

• El riesgo de aborto espontáneo, muerte fetal intraútero y abortos espontáneos recurrentes
• Diabetes gestacional
• Una complicación del embarazo caracterizada por presión arterial alta y signos de daño a otro sistema de órganos, en general, el hígado y los riñones (preeclampsia)
• Disfunción cardíaca
• Apnea del sueño
• La necesidad de una cesárea y el riesgo de las complicaciones que esta conlleva, como infecciones en la herida

Las mujeres que tienen sobrepeso u obesidad durante el embarazo enfrentan varios posibles riesgos de salud, que incluyen presión arterial alta, diabetes gestacional y una mayor probabilidad de parto por cesárea, añade.

Riesgos para la salud del feto relacionados con la obesidad

Asimismo, la experta de Embarazo Activo asegura que, los fetos en desarrollo de las mujeres obesas también corren más riesgo de tener problemas de salud como los que mencionamos a continuación:

• Ser considerablemente más grande que el promedio (macrosomía fetal) y con más grasa corporal que la normal, lo que supone un mayor riesgo de padecer síndrome metabólico y obesidad infantil
• Que se desarrollen defectos de nacimiento, sumado a la obesidad, hace que sea más difícil detectar estas enfermedades con ultrasonido
• La diabetes gestacional desarrollada en la madre también puede afectar al recién nacido, incluidos niveles peligrosamente bajos de azúcar en la sangre y niveles altos de bilirrubina, que pueden causar otro tipo de problemas de salud, y riesgo de padecer diabetes tipo 2 en algún momento de sus vidas.

El ejercicio físico debe comenzar muy poco a poco y con un entrenamiento lo más personalizado posible. Nada de impacto y con ejercicios de movilidad y fuerza. Imagen: Yanalya en Freeopik.

Cuándo se considera que existe el sobrepeso

Mariela Villar advierte: primero que nada, lo que debe de evaluar el médico obstetra y el profesional que atienda a la mamá en lo referente a nutrición, es  si está en su peso adecuado previo al inicio del embarazo. Si no está por debajo o por sobre de su peso saludable. Después de llegar a su normo peso, dependiendo de la estructura de cada mamá y de si es un solo bebé o más, se considera que si está dentro de los parámetros normales, podría subir entre 9 a 12 kg si es un solo bebé. Si son 2 bebés se estima entre 11 y 19 kg.

“También es muy importante el tipo de dieta que tenga, qué tipo de alimentos consume. Deben de ser de calidad, más alimentos que productos y según los requerimientos de cada embarazada, a determinar según los resultados de las analíticas personales”, afirma.

La obesidad se diagnostica cuando el índice de masa corporal es igual o mayor que 30. Para determinar el índice de masa corporal, se divide el peso por la estatura al cuadrado.

Consejos para evitarlo

Villar detalla que, si la madre no venía haciendo ejercicio físico desde antes, (que seguramente llevaba una vida muy sedentaria), debe de comenzar muy poco a poco y con un entrenamiento lo más personalizado posible. Nada de impacto y con ejercicios de movilidad y fuerza. Deberá tener la autorización de su médico tratante y una continuidad en las sesiones del ejercicio físico.

Puede comenzar desde que su médico personal le autorice, cuando no tenga náuseas, vómitos ni mareos, síntomas muy comunes en el primer trimestre de embarazo.

“Los ejercicios que se recomiendan son ejercicios de bajo impacto, caminatas, clases de gimnasio y yoga especiales de embarazo y si tiene adaptación al medio acuático, natación & aquagym para embarazadas. En el agua no sentirá su propio peso y le aliviará mucho a nivel osteoarticular”, aconseja.

“Llevar un plan de alimentación guiado por un profesional sanitario, controles periódicos con su médico obstetra y que las sesiones de ejercicio físico sean lo más personalizadas posibles, a cargo de un profesional especializado. Además, deberá de controlar muy de cerca la diabetes gestacional. En mamás con obesidad, hay más probabilidades que ésta la transmita”, concluye Mariela Villar.