Gimnasios españoles empiezan a restringir las grabaciones con móviles en sus centros

El aumento de jóvenes que se graban mientras entrenan en los gimnasios está causando malestar entre algunos abonados en estos centros deportivos en España. Cadenas como Smartfit y Masmusculo Fit han confirmado esta tendencia y ya han tomado medidas para abordarla.

Ignacio Usera, CEO de Smartfit, una cadena con 12 gimnasios en España, explica que ha recibido “quejas de usuarios que no se sienten cómodos rodeados de cámaras que les enfocan”. En respuesta, ha decidido prohibir las grabaciones que incluyan a otros usuarios sin su consentimiento. “Salvo algún caso excepcional, nuestros abonados entienden el motivo de la restricción y se apartan para poder grabarse solo a ellos mismos”, añade el directivo.

ADVERTENCIAS A LOS USUARIOS

El motivo de las prohibiciones es, según aclara Usera, “acallar las quejas, que los usuarios se sientan confortables y protegerse ante cualquier denuncia por grabaciones sin consentimiento”.

Pablo Campos, director de expansión de Masmusculo Fit, cadena con tres gimnasios en España, explica que en sus centros han comenzado a “prohibir las grabaciones con trípodes y a pedir a los usuarios que no incluyan a terceras personas en sus vídeos sin su consentimiento, advirtiéndoles también de posibles problemas”.

PROHIBICIÓN DE LOS TRÍPODES

Campos explica que la medida se implementó tras varias quejas de usuarios que encontraron hasta tres trípodes en una misma sala. “A nivel de seguridad, era un problema y, en cuanto a la comodidad, no formaba parte de la experiencia que queremos para nuestros usuarios”, puntualiza. Según el directivo, las quejas no provenían de ningún tipo de cliente concreto, sino que eran generalizadas.

Los centros de Masmusculo Fit han instalado ‘salas de posing’, espacios específicamente preparados para realizar grabaciones o fotografías con luces y espejos. “El objetivo es evitar que las fotos y grabaciones se realicen en otros puntos del gimnasio, además de ofrecer comodidad y un ambiente propicio para las cámaras”.

APRENDER A GESTIONAR EL USO DE LOS MÓVILES

Otra cadena que ha implantado ‘salas de posing’ con la misma finalidad es Dreamfit, según explica Rafael Cecilio, director de la enseña. El máximo responsable de la empresa indica que las prohibiciones sobre el uso de los móviles “no son adecuadas ni útiles”, aunque ve con buenos ojos alertar a los usuarios cuando estén grabando a otras personas sin su consentimiento para problemas con otros abonados.

El directivo señala que el uso de los teléfonos móviles por parte de los jóvenes en los gimnasios “es un desafío que requiere de una gestión efectiva” y agrega que los adultos mayores son quienes muestran una percepción más negativa hacia el uso de estos dispositivos electrónicos en los centros.

COMUNICACIÓN A LOS ABONADOS

Carlos Castañeda, socio y fundador de Fitup, tampoco aboga por las prohibiciones. En sus centros, solo se establece la norma de que quienes se graben no pueden monopolizar un equipo por más tiempo del habitual, para asegurar el acceso equitativo para todos los usuarios. En su opinión, regular las grabaciones de móviles “no es positivo mientras no haya quejas al respecto”, algo que no ha sido un problema en sus instalaciones. Para Castañeda, la clave está en educar a los usuarios y en la responsabilidad de cada persona.

Yolanda Latorre, gerente de la patronal de empresas de fitness Adecaff, argumenta que la prohibición de grabar imágenes de terceros sin su consentimiento es “plenamente válida en los gimnasios”. Según Latorre, aunque la ley sanciona a las empresas por esta práctica, no impone sanciones cuando son los particulares quienes graban o incluso publican estas imágenes en redes sociales. Desde su perspectiva, esto puede constituir una “intrusión en la intimidad y generar incomodidad entre los abonados de los gimnasios”.

El único requisito que debe cumplir el gimnasio al implementar prohibiciones es comunicarlo debidamente a sus abonados, según Latorre. “En la actualidad, los establecimientos que establecen normativas sobre estas prácticas son una minoría”, afirma la gerente. Para Latorre, la clave no radica en prohibir estas acciones, sino en regular de alguna manera cómo deben llevarse a cabo estas grabaciones o fotografías, que son cada vez más comunes.

AUGE EN ESTADOS UNIDOS

Latorre destaca que los gimnasios que terminarán tomando medidas serán aquellos que reciban más quejas. Añade que es probable que los gimnasios de bajo coste sean los más afectados, mientras que “los gimnasios premium no tendrán la necesidad de implementar medidas porque no se verán tan afectados por esta problemática”.

Estados Unidos va un paso por delante en estas restricciones, como ocurre con muchas otras tendencias del fitness. En el país norteamericano, ya son varias las grandes cadenas que han implementado políticas que restringen las grabaciones e, incluso, el uso de móviles en las instalaciones deportivas.

Es el caso de enseñas como 24 Hour Fitness, cadena de gimnasios con sede en California y casi 300 clubes en 11 estados; New York Sports Club, fundada en 1973 en Nueva York y con más de 60 gimnasios, y LifeTime, con más de 150 clubes deportivos en EEUU. Mientras tanto, otras cadenas estadounidense barajan la posibilidad de implantar prohibiciones.

Las fuentes consultadas coinciden en prever que esta tendencia podría expandirse España progresivamente y ante el auge de las grabaciones en los centros deportivos.