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Según el informe económico del fitness elaborado por '2Playbook'

Los gigantes del fitness español perdieron un 35,8% de ingresos en 2020

Gimnasio

Las principales cadenas de gimnasios española perdieron más del 35% de sus ingresos en 2020 como consecuencia de la pandemia

(1-2-2022) Las 24 principales cadenas de gimnasios de España perdieron un 35,8% de sus ingresos en 2020. Entre ellas sumaron un volumen de negocio de 516,1 millones de euros en el primer año de la pandemia.

Los gigantes del fitness español perdieron más de un tercio de sus ingresos como consecuencia de la pandemia durante 2020. Así lo refleja el Informe Económico del Fitness elaborado por ‘2Playbook’, que cifra en un 35,8% la caída de las 24 cadenas de gimnasios que más dinero facturaron en 2019.

Entre todas estas enseñas habrían alcanzado una facturación conjunta de 516,1 millones de euros, lo que representó en 2020 el 38,5% del global del sector en España, según datos proporcionados por Europe Active & Fitness Market Report, que estima que la facturación total aproximada del fitness español se situó en 1.340 millones.

Una cifra que se aleja significativamente de los 2.350 que el sector alcanzó en 2019, pero también de la de los años anteriores: 2.291 en 2018, 2.235 en 2017, 2.171 en 2016 y 2.130 en 2015. La pandemia, por tanto, hizo retroceder a la industria del fitness a cifras de inicios de la pasada década.

Las principales 15 cadenas de gimnasios habrían sufrido unas pérdidas agregadas de 158,5 millones de euros en 2020.

LOS RETOS DEL SECTOR

Tras la exposición del informe, algunos expertos del sector analizaron los dos últimos años en una mesa redonda en la que debatieron sobre los retos de presente y futuro que afronta la industria del fitness en España. Estas fueron algunas de las declaraciones más destacadas:

August Tarragó (Adecaff y Sintagmia)

“Todos los modelos de negocio han de reforzar su propuesta de valor, están obligados a hacerlo. Las empresas del sector han de escuchar ahora mucho más a sus clientes para potenciar sus relaciones. Hemos de desarrollar un modelo híbrido y nuevos espacios, porque el perfil de nuestros centros ha cambiado. Y toca hablar más de salud”.

Nico Sánchez (Claror)

“La experiencia del cliente ha evolucionado y ha cambiado mucho. Queremos mejorar mucho el producto para alcanzar una experiencia excelente. Nuestros equipos quedaron muy tocados, nos hemos tenido que reinventar mucho, con tantas restricciones. Este 2022 ha de servir para mimar a nuestros equipos”. 

Gabriel Sáez (Go Fit)

“El sector tiene que seguir invirtiendo en la notoriedad que nos merecemos. Recuerdo debates duros hace años de si éramos salud o educación física. Acompañamos a los equipos en todo momento para que no tuvieran problemas económicos. Hemos hecho grandes inversiones en limpiar el aire. Queremos continuar con la expansión de la compañía y con la inversión digital”. 

Ignacio Triana (Forus)

“Llevamos dos años que es un espectáculo. Somos un barco al que van bombardeando. No a todos los sectores les pasó que pasasen de facturar del 100% al 0%. Pocos sectores tienen las restricciones que mantenemos. Y a pesar de los pesares, no ha habido grandes cierres masivos de centros. Es un sector que ha hecho los deberes muy bien durante estos dos años de pandemia. Es un sector que por su exceso de atomización aún faltaba algo de profesionalidad, pero que ha mejorado una bestialidad”. 

“Con una inflación como esta, es insostenible este negocio si no hay una subida de precios, que tiene que ir acompañada de una mejora en el servicio que ofertamos. Lo que nos piden los clientes es que volvamos a los básicos, a lo más sencillo, pero que ocurra siempre: que le tratemos bien, oferta deportiva de primera, que funcione todo. La industria del fitness funciona bien en España, ahora tiene que salir fuera y conquistar caminos para demostrar lo que hemos aprendido”. 

Juan del Río (Vivagym)

“Toca recuperar equipo, cultura y propuesta de valor. Hay mucha fatiga en los equipos, están cansados. Debemos recuperar propuesta de valor, y eso pasa por recuperar la esencia de lo que éramos, amplia parrilla de ofertas dirigidas. Pasamos de un año de deflación a otro de inflación, con un efecto rebote en los costes, que a los empresarios nos hace una faena. Enero ha empezado regular, ha sido un mal mes, pero la propia fatiga que veo en la sociedad me indica que 2022 será mucho mejor de lo que ha empezado. Espero que la vuelta a la normalidad llegue antes de lo previsto”. 

“Creo que no habrá guerra de precios. A pesar de que aumentará la oferta de centros, no nos podemos permitir guerra de precios. Me gustaría pensar que el low cost se mantendrá por debajo de los 30 euros, pero no soy capaz de decirlo, porque los factores externos (energía, alquileres y equipos) van empujando en el sentido contrario. Vamos a hacer esfuerzo para mantener precios, pero también para ofrecer cosas a parte de la cuota”. 


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